¿Es seguro viajar en Avión?

Desde los inicios de la aviación con los hermanos Wright y Santos Dumont, a inicios de siglo 20, hemos sido testigos de una evolución constante y sorprendente de esta industria que se hace cada vez más grande y común a nivel mundial, pasando de los pequeños monomotores que vieron nacer a los primeros aviadores, hasta los grandes aviones de cabina ancha que conectan los continentes sin escalas.

A pesar de los esfuerzos de las grandes casas fabricantes de aeronaves por brindarnos aviones comerciales de vanguardia, con las últimas tecnologías; todos los años escuchamos de uno o varios accidentes aéreos alrededor del globo terráqueo, creando una atmósfera de incertidumbre y temor sobre volar.

Es por lo mencionado con anterioridad, que decidí realizar una investigación sobre las tasas de accidentalidad en el mundo aeronáutico y hacer un contraste con los demás medios de transporte existentes en la actualidad; cuyos resultados fueron sorprendentes.

Según la base de datos de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional), en su tasa de accidentalidad con fatalidades para los últimos 10 años, se pudo evidenciar un total de 136 accidentes con 3.256 víctimas mortales, los cuales se clasifican anualmente de la siguiente manera:

Al hacer un análisis de la misma cantidad de pasajeros transportados entre los años 2011 y 2020, según las cifras del Banco Mundial, encontramos un total de 33.710.000.000 (treinta y tres mil setecientos diez millones) de viajeros a través del mundo.

Haciendo un contraste porcentual entre el total de viajeros y los decesos como consecuencia de accidentes aéreos durante la última década, llegamos a un resultado contundente que permitió responder a la pregunta planteada en el presente blog:

Si comparamos el resultado con el promedio anual mundial de muertes por accidentes de tránsito, emitido por la Organización de Naciones Unidas (ONU), cuyo resultado es de 1.350.000 (un millón trescientos cincuenta mil) – y de 13.500.000 por 10 años, de los 7.800.000.000 habitantes que tiene el planeta; encontramos una gran diferencia, que nos permite percibir al avión como un medio de transporte altamente seguro y con pocas probabilidades de sufrir un accidente.

¿Entonces por qué nos impactamos tanto con cada accidente aéreo que ocurre?

En primer lugar, debemos aclarar que todas las pérdidas de vidas nos van a generar un impacto e impresión negativa, pero la respuesta a esta incógnita la podemos responder comparando dos tipos de accidentes: las vehiculares con las aeronáuticas.

Todos los días escuchamos noticias en nuestras ciudades sobre accidentes de tránsito, en los que en algunos de los casos fallecen los implicados (generalmente 1 o 5 ocupantes). Pese al impacto de la noticia, tristemente se nos ha convertido en algo cotidiano. A pesar de que el porcentaje de vidas perdidas en este tipo de accidentes puede parecer “menor”, al realizar la sumatoria de todas las que ocurren diariamente, se convierte en algo alarmante.

Algo opuesto es lo que ocurre en el mundo de la aviación. Los accidentes suceden de manera muy ocasional y son realmente poco frecuentes, pero cuando ocurren, el número de víctimas es exorbitante; pues en las aeronaves comerciales de la actualidad, el común denominador de pasajeros va entre 100 en el Embraer 190 (aeronave comercial de mediano alcance), hasta 853 en el Airbus A380 (aeronave comercial pesada de largo alcance – intercontinental).

Una conclusión indiscutible

Podemos concluir que es altamente seguro viajar en avión, y que las probabilidades de sufrir un accidente son realmente bajas. Inclusive, estas suelen disminuirse más gracias a las constantes mejoras que son aplicadas en los entrenamientos de pilotos ante situaciones de emergencia.

Ahora podrás volar a tu destino con total tranquilidad, ya que las probabilidades de que algo ocurra son pocas y que en caso de que llegara a suceder, los pilotos se encuentran cada vez mejor preparados para reaccionar de manera satisfactoria.

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